El gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, dijo que aunque “le quitaron un año de gobierno, a la mala”, cumplirá sus planes de gobierno en los cinco años que estará al frente del Ejecutivo estatal.
Ante el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien encabezó un diálogo con los pueblos otomí, náhuatl, totonaco y tepehua de la entidad, pidió a los poblanos paciencia para que se echen a andar los programas de infraestructura social.
En ese sentido, el mandatario estatal afirmó que pese a la restricción del tiempo, de inmediato trabajarán para que se construyan los caminos que conecten a las comunidades más apartadas.
“Me quitaron un año, me lo escamotearon, por eso mis planes son de cinco años y ahí va el proyecto camionero y carretero que he planteado”, dijo al señalar que el tema de los caminos es para los gobiernos del estado y federal “un plan de inmediato, mediano y largo plazo y lo tendremos así planificado”.
Barbosa Huerta reprochó que los integrantes de las comunidades indígenas acusen olvido y pidió que eliminen de sus reclamos dicha palabra, ya que -aseveró- su gobierno está de lado de sus demandas y trabaja para resolverlas a la brevedad.
“Veo a indígenas como agentes de cambio, no como los olvidados. Hoy en Puebla tienen un gobierno federal que se identifica con ustedes y un estado que lo hace de manera completa. No son olvidados, quítenla de su diccionario de reclamos, ya no lo son”, expresó.
El gobernador poblano afirmó, además, que se defenderán las tradiciones y costumbres de los pueblos indígenas ya que forman parte de la mexicanidad y deben ser preservados.
“Son la evidencia de la mexicanidad y tenemos el propósito de preservarlos, su cultura, su lengua, sus tradiciones y combatir la desigualdad, no el olvido”, manifestó Barbosa.